¿Cómo protegerse del frío en una casa?
Si la casa está mal aislada, las temperaturas bajas generalmente se asocian con el aumento de la factura de calefacción para disfrutar de un interior cómodo. Por tanto, es importante encontrar las puntas adecuadas para conservar el calor. En un momento, se adoptaron métodos simples y naturales para mantenerse caliente en casa.
Lo primero que debe recordar es que es más difícil calentar paredes y techos que calentar el aire ambiente. No tiene sentido dejar la calefacción encendida todo el día si las paredes y tabiques están mal aislados. Las paredes exteriores absorben el frío, parte del cual se difunde en el interior. Dado que puede extenderse rápidamente a todas las habitaciones, es mejor arreglarlo lo antes posible.
Cubrir las paredes
Las paredes de ladrillo (50 cm de espesor) o piedra no retienen el calor. En invierno, las temperaturas medidas en estas superficies son generalmente de 3 a 4 ° C más frías que el aire ambiente. sin embargo, el pérdidas de energía se puede reducir cubriéndolos con marcos o espejos. Un simple cartel pegado a la pared hace que el mercurio suba 1 ° C.
Elegir una alfombra gruesa es bueno para no dejar escapar el calor, así como una gran estantería llena de libros presionados contra la pared también es una gran opción.
Cierra las cortinas a primera hora de la tarde
Durante el día, la luz del sol difunde una ola de calor por las habitaciones. El acristalamiento de la ventana captura los rayos infrarrojos y, por lo tanto, retiene el calor.
Por otro lado, una vez que cae la noche, las ventanas de un solo vidrio se vuelven prácticamente heladas. Al confiar en la medición de una cámara termográfica, la temperatura del interior de las ventanas puede bajar a 7 ° C. Incluso las ventanas de doble acristalamiento no son inmunes a este fenómeno. De hecho, su pared interna puede mostrar una temperatura de 14 ° C, lo que resulta en una pérdida de energía de 50 a 100 vatios por metro cuadrado.
Para anticipar la pérdida de calor, simplemente adopte un gesto simple: cierra las cortinas y las persianas una vez que se haya puesto el sol. Aunque son bastante delgadas, las cortinas pueden proporcionar una barrera para reducir la pérdida de calor radiante. Agregar un buen aislamiento también ayuda a bloquear las corrientes de aire que enfrían la habitación. Algunas persianas pueden elevar el mercurio a 16 ° C. Combinados con cortinas gruesas, reducen significativamente la pérdida de calor.
Aislar la puerta de entrada
El aire circula por todas las paredes de la casa, incluida la puerta. Cuando este último es fino o vidriado, su aislamiento deja mucho que desear. Las temperaturas pueden bajar a 10 ° C durante las noches más frías. Por tanto, reforzar el aislamiento es fundamental para retener el calor. Sin embargo, cubrir la puerta de entrada no es suficiente. Las paredes circundantes de una cortina gruesa también deben cubrirse con un buen aislamiento para evitar que pasen corrientes de aire.
Instalar paneles de madera
En un momento, las pantallas de madera se usaban con frecuencia. Los "ancianos" se acurrucaron cerca de la chimenea para calentarse. Los paneles de madera, colocados detrás para devolver el calor liberado, servían para mantener calientes sus espaldas. Puede hacer lo mismo protegiendo su rostro con una pantalla de chimenea.
Organiza bien tus muebles
Aunque la temperatura del aire afecta la temperatura de una habitación, los muebles también deben estar bien colocados para mejorar la sensación de calidez. Si están lejos del centro de la habitación, el calor se sentirá mejor. Al colocar muebles de oficina cerca de los tabiques, se bloqueará el frío exterior.
En el caso de que la cabecera de la cama se coloque contra una pared exterior, los músculos del cuello pueden endurecerse por el frío. Para evitar estos inconvenientes, es mejor optar por un cabecero más grueso. Los expertos recomiendan la cama con dosel, un mueble macizo que es eficaz para proteger contra las temperaturas bajo cero.
Cubrir el suelo
Si bien la disposición de los muebles influye en el bloqueo de corrientes de aire y frío, ciertos elementos decorativos también juegan un papel importante en la conservación del calor. Si el piso o las baldosas congelan los pies, la elección de uno buena alfombra es necesario. De hecho, actualmente existen diferentes tipos y están disponibles en todos los estilos. Los modelos de terciopelo con estampados de colores aportan la calidez esperada al tiempo que realzan la decoración.
Aislamiento térmico del suelo También reduce la propagación del frío en la casa. Es obligatorio en el caso de suelo o parquet. En cuanto al piso a nivel, el aislamiento debe realizarse en el momento de la construcción. La operación consiste en colocar el aislamiento encima de la losa utilizando una película impermeable para separarlos y así proteger el aislamiento.
Para el aislamiento, se recomiendan lanas minerales, cáñamo, madera y bolas de arcilla. Para otros tipos de suelos, los especialistas suelen recurrir al poliestireno expandido. Es un material sintético con la particularidad de ser permeable al vapor. La pluma de pato también es una excelente alternativa para retener el calor.
Tenga en cuenta que cubrir el suelo y las paredes a veces requiere la intervención de un profesional. Además, es mejor llamar a un personal de mantenimiento experimentado para garantizar su efectividad.