6 consejos para secar las flores correctamente
Secado: el secreto para dar una segunda vida a las flores
Las flores naturales ocupan un lugar destacado en cualquier proyecto de interiorismo. No solo te permiten crear bonitos ramos, cestas u otros arreglos florales, sino que además aportan un toque alegre y colorido que le da alma al hogar. De color rojo vivo, azul lila o amarillo dorado, sus pétalos resaltan el rincón de la habitación donde se colocan. Habiendo dicho eso, el vida efímera de las flores a menudo plantea un problema para los entusiastas. La mayoría de las flores de jardín son anuales. De ahí la necesidad de secarlos para evitar que se caigan y mueran después del corte.
Secar flores requiere un trabajo cuidadoso. Debe hacerse como debe hacerse, es decir, en el mejor momento y adoptando buenas prácticas.
Seleccione los cultivares con cuidado
Las variedades no son todas iguales. El tiempo de secado puede ser cuestión de unos días o unas semanas. El secreto para un secado exitoso es garantizar:
- Prefiera las flores con tallos grandes, ya que los tallos demasiado tiernos se doblan y se marchitan fácilmente.
- Trate a las reinas en el jardín como rosas, peonías, inmortelles con brácteas o hortensias caracterizadas por grandes inflorescencias individualmente. No se trata de agruparlos en grupos.
- Mantenga algunas especies en reserva, en caso de pudrición.
Contrariamente a la creencia popular, las variedades silvestres también ofrecen excelentes resultados después del secado. Este es particularmente el caso de:
- milenrama;
- Cenizas de montaña;
- tanaceto vulgar;
- la caña común;
- etc.
Recoge las flores en el momento adecuado
Antes de cualquier intervención, es fundamental conoce el tiempo de floración. Es más probable que el secado tenga éxito si la recolección se realiza en los primeros días de floración de la inflorescencia. La situación empeorará si todos los botones florales ya están abiertos. A este respecto, conviene distinguir entre variedades tempranas y variedades tardías.Los diferentes métodos de secado
La buena noticia es que hay muchas formas de eliminar el agua de las hojas y los pétalos.
- Secar al aire libre
Es un proceso extremadamente sencillo que se lleva a cabo en 6 pasos:
- Prepare aerosoles combinando de 8 a 10 tallos de la misma flor.
- Agrupa las flores por especies.
- Quite las hojas de alrededor del tallo, así como las espinas de las rosas.
- Deseche el tallo por completo si está demasiado blando o puede romperse durante el secado (caso de helicriso).
- Ate los extremos de las roldanas con una goma elástica o cordón de rafia. Haga varias vueltas repetidas para mantener la cuerda tensa.
- Cuando los ramos estén terminados, cuélgalos boca abajo (tallo hacia arriba y pétalos hacia abajo). Se puede usar una percha, un clavo o una grapa para colgar los ramos.
Es una buena idea colgar las coronas en un lugar oscuro, expuesto al viento y al calor, el ático por ejemplo. El lugar debe dejar entrar la menor cantidad de luz posible, de lo contrario las flores se pudrirán rápidamente. Los tallos se irán haciendo más pequeños gradualmente, pero el elástico evitará que se escapen.
El secado será perfecto a las 2 o 3 semanas. Las flores secas se contraen ligeramente al tacto y tienen un tallo muy rígido.
- Uso de productos
El secado natural se puede mejorar mediante la aplicación de productos. La laca ayuda a las plantas a resistir la rotura y la pérdida de pétalos.
En cuanto a la glicerina, mantiene intactos los colores de las flores. Para que las hortensias y la lavanda no pierdan su brillo después del secado.
- Horno de convección
Para secar las flores más rápido que con el método natural, el horno de convección es otra alternativa. Sin embargo, se debe considerar el ajuste del horno:
- Haga un tamaño de malla adecuado para la cantidad de flores que se van a secar.
- Inserte con cuidado las flores en los agujeros de la rejilla: los cogollos deben permanecer rectos y los tallos suspendidos.
- Calentar el horno de convección entre 37o y 40o Es importante mantener una temperatura baja para no quemar las flores, aunque eso signifique dejar varias horas de calentamiento.
- Saca las flores del horno una vez que se hayan secado y déjalas enfriar sobre otra rejilla.
Las grandes inflorescencias como los arándanos o los crisantemos son especialmente adecuadas para este tipo de secado. Para un rendimiento óptimo, se recomienda ventilar la habitación donde está instalado el horno.
- Paso en un desecador
La tercera opción de secado es enterrar las flores en un desecador. En la práctica, deben cubrirse con un material absorbente que elimine el agua almacenada en el cáliz y la corola. En cuanto a los productos de desecación, los centros de jardinería ofrecen gel de sílice, arena fina o bórax mezclado con harina de maíz blanco. Esta es la práctica a adoptar para que los lirios o rosas sigan perfumando el hogar en todas las estaciones.
Algunos expertos en horticultura aconsejan esparcir sal no yodada. Este producto retrasa la decoloración de los pétalos una vez que las flores han terminado de secarse. Posología: verter 3 cucharadas soperas en 1 litro de disolvente.
He aquí cómo hacerlo:
- Seque las flores inmediatamente después de cortarlas.
- Elija un recipiente adecuado para enterrar las flores mixtas en el desecador: una caja de cartón abierta es ideal si el material utilizado es bórax o arena. En el caso del gel de sílice, la apertura del recipiente debe estar sellada.
- Si es necesario, corte el tallo para que la flor entre en el recipiente.
- Enterrar las flores: empezar vertiendo arena, gel de sílice o bórax en el recipiente (la capa debe tener de 3 a 4 cm de espesor). A continuación, coloque las flores en el material, asegurándose de que se levanten correctamente. Luego aplique más desecante hasta que desaparezcan los granos.
Nota Bene : la arena es un poco especial, porque no debe enterrar completamente las flores. El aire libre drenará el agua de los pétalos y la arena estará allí solo para sostener las plantas.